Testimonios Voluntariado Europeo Ver más testimonios-europeos de amycos.org »

Francesco Esposito – Burgos

Si pienso en tres palabras que pueden resumir mi SVE serían: inolvidable, interesante y útil.

Si pienso en tres palabras que pueden resumir mi SVE serían: inolvidable, interesante y útil.

Inolvidable porque creo que cada experiencia que he hecho hasta ahora en el extranjero merece ser inolvidable, en lo bueno y lo malo. Muchos momentos que he pasado en Burgos dejan su huella, dejan su recuerdo en lo que hago ahora que mi SVE ha terminado.

Interesante porque han pasado muchas cosas, he conocido a muchas personas, he visto nuevos lugares, nuevas ciudades españolas, he conocido mucha gente nueva y he podido volver a ver mucha gente que he conocido en mis momentos que había pasado en España y que siempre me hace ilusión volver a ver.

Finalmente, útil porque como las experiencias pasadas he podido aprender mucho de mi trabajo y sobre todo para mi trabajo. Ha sido útil porque pienso que este año, más que los otros, he podido aprender cómo querría que fuera mi trabajo, mi ambiente de trabajo, mis compañeros de trabajo. He podido entender que quiero y que necesito un ambiente de trabajo positivo, un ambiente de trabajo donde exista un espíritu de equipo, fundamental para enfrentarme a cada día en la oficina o en el desarrollo de talleres. Ha sido útil porque he comprendido con quién quiero vivir si tengo que compartir un piso otra vez, con qué gente quiero compartir mis momentos fuera de la oficina, en mi tiempo libre.

Durante estos nueves meses he realizado muchos talleres sobre diferentes temas, he podido compartir momentos con gente de muchos países, he podido volver a utilizar mi tiempo para ayudar a niñas y niños en la realización de las tareas. He podido ayudar a personas de diferentes países a acercarse a un idioma nuevo, a un idioma que es necesario aprender para empezar una nueva vida, buscar un nuevo trabajo y compartir momentos con otras personas. He podido comprobar como sigo prefiriendo un trabajo en contacto directo con la población, con los migrantes y, sobre todo, con los niños; así mismo me he podido dar cuenta de cómo el trabajo en la oficina es importante y necesario.

Este SVE tal vez sea el último proyecto europeo en que pueda participar y seguramente deje su huella.

Mi espíritu europeo ya era fuerte antes de volver a un proyecto europeo, pero cada vez que empiezo un proyecto como éste me doy cuenta de la importancia de los proyectos europeos que puedan incluir a muchos jóvenes en la realización de una ciudadanía europea. Al mismo tiempo, es fundamental que se trabaje en todos los diferentes niveles del país para desarrollar esta ciudadanía y ponerla en práctica.